Chicago Bulls, La década de oro con Jordan, Pippen y Rodman

Sin duda alguna el equipo de baloncesto del estado de Illinois, Los Chicago Bulls, es uno de los mejores equipos de la historia del baloncesto. Su estandarte, buque insignia, jugador franquicia y, obviamente, embajador del club americano es Michael Jordan. Para mi es el mejor jugador de la historia del baloncesto y uno de esos personajes que han marcado un antes y un después en nuestra historia más reciente, junto con personajes de la talla de Steve Jobs o Michael Jackson. Hoy escribo este artículo para todos aquellos amantes del basket, de los Bulls, y del deporte en general. 

Chicago Bulls de los 90´s

La decada de los años 90´s fue la época de dorada de los Chicago Bulls. Sin duda alguna durante esos años se convirtió en uno de los mejores equipos de la historia. En este grandioso equipo sobresalían tres hombres por encima del resto, e intentar ponerles adjetivos sería absurdo ya que por mucho que lo intentáramos siempre nos quedaríamos cortos. Ellos son Scottie Pippen, con el nº 33; Denis Rodman, con el nº 91; y el grandioso, impresionante, espectacular y mejor jugador de la historia, con el 23 en la espalda: MICHAEL JORDAN. 

Rodman, Pippen y Jordan

Estas tres estrellas, con la inestimable ayuda de sus demás compañeros, llevaron al equipo del estado de Illinois a lo más alto en el mundo del baloncesto. En menos de 10 años consiguieron alzarse con  seis títulos de la NBA, una auténtica barbaridad. Pero está historia debe contarse en dos partes: Primera mitad (desde el año 1991 hasta el 1993, sin Denis Rodman) y segunda mitad (desde la vuelta de Jordan y el fichaje de Rodman en 1994, hasta 1998)

En la temporada 1990-1991 consiguieron el récord de la franquicia, ganando 61 encuentros en la fase regular. En las finales de conferencia, destrozaron a los Pistons. Solamente perdieron un partido antes de alzarse con su primer trofeo, fue contra los Lakers de otro mítico jugador como fue Magic Johnson. Un jovencísimo Jordan se alzó, tanto en la fase regular como en los playoffs, con el título de MVP, que le acreditaba como mejor jugador del año, además de conseguir su quinto título consecutivo de mejor anotador de la NBA.  

En la temporada siguiente, la 1991-1992, más de lo mismo. Los Bulls volvieron a superar el récord de victorias y esta vez con un total de 67 victorias en la temporada regular. Ese año en la final de la NBA se enfrentaron a los Trail Blazers de otro jugador histórico: Clyde Drexler. Este título les costó un poco más ya que necesitaron 6 partidos para alzarse con su segundo título consecutivo. Como no podía ser de otra manera, el gran Michael Jordan volvió a ganar toda clase de títulos y menciones individuales, así como el MVP de la temporada regular, el MVP de las finales y el de máximo anotador de la liga. 

Después de ganar dos títulos seguidos, nadie imaginaba lo que estaba a punto de suceder. en la temporada "92-93" lo volvieron a conseguir. Volvieron a conquistar la cima del baloncesto mundial. En esta ocasión el rival no fue otro que los Phoenix Suns de Charles Barkley. También tuvieron que jugar 6 partidos como la temporada anterior, imponiéndose a los Suns por 4-2 en la final. Para no perder las costumbres, Michael Jordan fue nombrado MVP de la final y por 7ª vez consecutiva, máximo anotador de la liga, igualando así a otro mito del baloncesto como fue Wilt Chamberlain. En esta ocasión el MVP de la liga regular fue para un grandísimo Charles Barkley. 

Tras conseguir el denominado "Three-Peat", y tras el fallecimiento de su padre, Michael Jordan decidió anunciar su retirada del mundo del baloncesto al finalizar la temporada 1992-1993. El mundo quedó conmocionado y seguro que para muchísima gente, el tiempo se detuvo y se quedaron casi sin respiración. Los Bulls obviamente echaban de menos a Jordan, pero quedaron muy bien defendidos y liderados por Scottie Pippen. El jugador americano logró ser el MVP de la fase regular, ya que seguramente él sabía que si no lo había ganado antes era porque había un ser superior llamado Michael Jordan. Ese año no se consiguió ningún título ya que, aunque se clasificaron para los playoffs, fueron eliminados en segunda ronda por los Knicks de Nueva York. 

Denis Rodman, un búfalo en Chicago

Al año siguiente, con el regreso de Jordan, los Bulls apostaron por un chico extrovertido nacido en Nueva Jersey llamado Denis Rodman y que sin duda alguna reforzaría las posiciones interiores del quinteto de Chicago. Te puede gustar más o menos, pero lo que no es discutible es que Rodman es una persona con carácter, que no se arruga ante nada ni nadie y muy excéntrico. 

Los Bulls se preparaban para volver a ser campeones, querían volver a estar arriba, en la cima. Para ello dejaron atrás su antiguo pabellón, aquel en el que tantas y tantas noches hubo magia, aquel en el que el corazón latía en un solo color y a un solo ritmo: el color rojo de los Chicago Bulls. Tras 27 años de vivencias, éxitos, alegrías y tristezas, los Bulls se trasladaron hasta lo que a día de hoy es su templo, su casa, su fortaleza: El United Center de los Chicago Bulls. Todo esto ocurrió en el regreso del hijo prodigo, Michael Jordan volvía a vestirse con la camiseta roja de los Bulls. El equipo decía adiós a jugadores de la talla de Grant y Scott Williams, y también se retiraron dos grandes jugadores de la franquicia: John Paxson y Bill Cartwright. Por otra parte, las incorporaciones fueron buenas y especialmente en dos jugadores, Ron Harper y Denis Rodman (este último fue a la temporada siguiente procedente de los Pistons).

Rodman, Jordan y Pippen vs Supersonics

En la temporada de 1996 fue como si hubieran vuelto a atrás en el tiempo, con mejores jugadores pero sensaciones muy parecidas. Pasaron en tan solo un año de un balance en temporada regular de 47 victorias por 35 derrotas a un increíble 72-10, imponiendo un récord histórico en la NBA. Ese año se alzaron nuevamente con el título de campeones de la NBA frente al equipo de Gary Payton los Seattle Supersonics. Rodman, Pippen y Jordan fueron nombrados los tres en el mejor equipo defensivo de la NBA, siendo el primer equipo en la historia de la NBA en tener a tres de sus jugadores entre el mejor quinteto defensivo. A nivel personal, Jordan ganó lo que se denomina como la "Triple Corona": MVP de la fase regular del campeonato de la NBA, MVP del All Star Game y MVP de las finales. Rodman consiguió el de mejor reboteador de la liga regular y Toni Kukoc el de mejor sexto hombre.

Al año siguiente, en la temporada 1996-1997, lo volverían a hacer quedando a solamente una derrota de igualar las 72 de la anterior campaña. Tras volver a arrasar en los playoffs y obviamente en la temporada regular, los Bulls se enfrentaban esta vez a los Utah Jazz en las finales de la NBA. En el equipo de Utah había dos nombres propios, John Stockton y Karl Malone. Los Bulls les pasaron por encima de los Jazz. Jordan volvió a ser indiscutiblemente perfecto ganando ademas su noveno título de máximo anotador. Rodman consiguió su sexto título consecutivo como máximo reboteador. Además Pippen y Jordan, con motivo del 50 Aniversario de la NBA, fueron nombrados entre los 50 mejores jugadores de la historia de la NBA.

Cuando todos pensaban que ya no podrían conseguir ganar nada más, y que nadie pensaba que podrían volver a repetir, lo hicieron. Lo denominaron "Repeat The Three-Peat". Volvieron a conseguirlo, otra vez 3 títulos seguidos de la NBA con un baloncesto espectacular. Con un Jordan superlativo, un Pippen con mano de cirujano y un Rodman pegándose con todos en defensa y ataque. En esta ocasión volvieron a imponerse a los Utah Jazz. En esta ocasión, Jordan volvió a ganar todos los títulos posibles a nivel individual y Rodman se alzó con su séptimo título de máximo reboteador.

Este año, 1998, fue el final de la mejor década de la historia de los Bulls, nunca lo volvieron a hacer, y es muy difícil que alguien consiga repetirlo alguna vez en la historia de este grandísimo deporte que es el baloncesto. Ganar 6 títulos en menos de 10 años es una auténtica locura, y a veces hay que esta un poco loco para que te guste este deporte.

Aunque yo sea muy joven y no haya podido disfrutar en directo de esta gloriosa época de los Bulls, sin duda alguna he visto muchos partidos en internet y me hubiera encantado poder haberlos disfrutado como seguramente muchos de vosotros lo hayáis hecho. Este es mi pequeño homenaje a esos Bulls que hicieron en menos de diez años algo increíble, algo que no tengo claro que pueda volver a repetirse. Para mi Michael Jordan es el mejor deportista de la historia y el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos. Espero que os haya gustado el artículo y lo disfrutéis como yo he disfrutado escribiéndolo.

Michael Jordan en el Concurso de Mates 

Redactado por: Marcos Garcia (@Marcos_14_)